jueves, 11 de diciembre de 2008

LOS PELIGROS DEL VENTILADOR


Artículo del Coordinador de IU en Alhama, Damián Rubio Rubio.

Nuestros políticos municipales se han empeñado en dar espectáculo en los plenos que se celebran en nuestro consistorio cada mes. Sin ir más lejos en el último pleno del mes de noviembre, que se presumía sin problemas porque el único punto del orden del día era la concesión de la medalla de honor de Alhama al folklore tradicional, representado por los grupos de coros y danzas Ntra. Sra. Del Rosario y Villa de Alhama, pudimos asistir a un episodio realmente bochornoso protagonizado por el Sr. Espadas, concejal de urbanismo y portavoz del PSOE, al responder a una pregunta formulada por el Sr. Cánovas, portavoz de UDeRM.
Me consta que son muchos los alhameños que siguen el desarrollo de las sesiones plenarias en la televisión local, porque consideran que es una buena forma de mantenerse informados sobre los asuntos de interés municipal. En esta ocasión pudieron apreciar de qué forma tan absurda un representante municipal puede perder los papeles, hasta el extremo de insultar reiteradamente a quién sólo le estaba realizando una pregunta.
El Sr. Cánovas, en el apartado de ruegos y preguntas, solicitó al Sr. Espadas explicaciones acerca de la aparición de su nombre en una conversación telefónica grabada por la Guardia Civil al actual alcalde de Totana, con motivo de las investigaciones sobre el caso Tótem. En la misma el interlocutor del primer edil totanero hace referencia a la intercesión de “su compañero y amigo”, Sr. Espadas, ante el Delegado del Gobierno para solucionar el problema de un empresario implicado en la explotación de inmigrantes, que había sido sancionado con una multa de diez millones de pesetas.
El planteamiento del Sr. Cánovas, peor o mejor intencionado, en ningún momento contenía insultos o injurias hacia el portavoz del PSOE. Se limitó a exponer el contenido de la grabación y a formularle tres cuestiones que él consideraba de interés para los alhameños: ¿Conocía este asunto? ¿Tenía algo que decir al respecto? ¿En calidad de qué intervino? El Sr. Espadas respondió con amenazas de querella por injurias e insultos dirigidos al portavoz de UDeRM, llegando incluso a cuestionar su dignidad como representante de los alhameños en el pleno. La actitud agresiva y fuera de tono del interpelado pone en evidencia su falta de argumentos para responder de forma convincente a las cuestiones planteadas. En su defensa afirmó que no intercedió ante el Delegado del Gobierno como político afín, sino en ejercicio de su profesión de abogado. No entiendo entonces su nerviosismo ni su salida de tono, si realmente en la fecha de los hechos acaecidos no tenía responsabilidad de gobierno.
Por si el “espectáculo” estaba falto de ingredientes, el Sr. Alcalde intervino para añadir salsa al mismo. No renunció a su cuota de protagonismo, llamando al orden al Sr. Cánovas, hasta hace poca fechas su “mano derecha”, mientras duraron los improperios de su actual “pareja de baile”.
Lo único que comparto con el Sr. Espadas es que “con lo que está cayendo” no es conveniente poner en marcha los ventiladores por si alguien se constipa.

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