La situación estratégica que ocupa Alhama en la Región de Murcia hace que sea un lugar apetecible para la ubicación de proyectos que precisen buenas comunicaciones. Nuestro municipio se encuentra equidistante de los principales núcleos de población, está cerca de un puerto importante a nivel nacional como es el de Cartagena, es atravesado por la Autovía del Mediterráneo, está próximo al futuro aeropuerto regional y dentro del proyecto de Alta Velocidad. Estas circunstancias no están sirviendo para desarrollar el tejido productivo -no hay más que acercarse a nuestro Parque Industrial para comprobarlo-. Sin embargo, los especuladores no dejan de presentarnos macro-proyectos relacionados con el urbanismo.
Después del monumental fracaso del Condado de Alhama de Polaris, y la paralización de todos los desarrollos urbanísticos que pretenden convertir nuestro pueblo en una urbe de más de 100.000 habitantes, la última aparición estelar en nuestra localidad nos llega directamente de Holliwood. El PP pretende convertirnos en protagonistas de la película que está montando para conquistarnos con vista a las próximas elecciones.
Una vez agotado el manantial del “agua para todos”, nuestro Gobierno Regional se ha sacado de la chistera el parque temático de la Paramount, con el que vienen bombardeándonos en los medios de comunicación desde hace un año. En los últimos tiempos, Alhama ha saltado a la primera plana de los mismos por ser el municipio elegido para su posible ubicación.
Creo que en torno a este asunto se ha montado un circo mediático que responde, única y exclusivamente, a una estrategia encaminada a convencernos de las bondades de un proyecto que nos va a sacar a todos los murcianos de la crisis por arte de “birlibirloque”. El Gobierno Valcárcel sigue confiando en la magia de la especulación en lugar de invertir en tejido productivo regional.
A todo esto, después de un año de estar saliendo prácticamente a diario en prensa, radio y televisión, aún no existe un proyecto concreto, ni inversores que lo respalden. Hasta ahora, lo único concreto es que hay una opción de compra de terrenos en las Cañadas de Alhama. Sin embargo, nos marean con todo tipo de macro-cifras: millones de m2 de extensión, millones de visitantes, miles de puestos de trabajo y plazas hoteleras, etc. No deja de sorprenderme que algo “tan goloso” no tenga más novios en el resto de España y, si me apuran, en Europa. Permítanme, aunque sólo sea por esto último, que me muestre escéptico y me huela a “gato encerrao”.
Por otra parte, no me extraña que el Sr. Cruz, que ha sido capaz de montar un bochornoso espectáculo derivado de su condenable agresión, se sienta como pez en el agua montando un “tinglao” de dimensiones estratosféricas a cuenta de la ya famosa Paramount. Lo más grave es que nuestros gobernantes locales, a los que se les ningunea desde el Gobierno Regional, estén dispuestos a modificar nuestro Plan General de Ordenación Urbana, que aún está pendiente de su aprobación definitiva, sin que exista un proyecto tangible.
De nuevo, el cuento de la “gallina de los ladrillos de oro” cobra protagonismo en el PPSOE. En esta ocasión, me parece que el huevo es tan gordo que sólo puede ser de avestruz. Espero que nuestros políticos no escondan la cabeza bajo tierra y dejen al descubierto la retaguardia, porque las consecuencias pueden ser verdaderamente imprevisibles.
Después del monumental fracaso del Condado de Alhama de Polaris, y la paralización de todos los desarrollos urbanísticos que pretenden convertir nuestro pueblo en una urbe de más de 100.000 habitantes, la última aparición estelar en nuestra localidad nos llega directamente de Holliwood. El PP pretende convertirnos en protagonistas de la película que está montando para conquistarnos con vista a las próximas elecciones.
Una vez agotado el manantial del “agua para todos”, nuestro Gobierno Regional se ha sacado de la chistera el parque temático de la Paramount, con el que vienen bombardeándonos en los medios de comunicación desde hace un año. En los últimos tiempos, Alhama ha saltado a la primera plana de los mismos por ser el municipio elegido para su posible ubicación.
Creo que en torno a este asunto se ha montado un circo mediático que responde, única y exclusivamente, a una estrategia encaminada a convencernos de las bondades de un proyecto que nos va a sacar a todos los murcianos de la crisis por arte de “birlibirloque”. El Gobierno Valcárcel sigue confiando en la magia de la especulación en lugar de invertir en tejido productivo regional.
A todo esto, después de un año de estar saliendo prácticamente a diario en prensa, radio y televisión, aún no existe un proyecto concreto, ni inversores que lo respalden. Hasta ahora, lo único concreto es que hay una opción de compra de terrenos en las Cañadas de Alhama. Sin embargo, nos marean con todo tipo de macro-cifras: millones de m2 de extensión, millones de visitantes, miles de puestos de trabajo y plazas hoteleras, etc. No deja de sorprenderme que algo “tan goloso” no tenga más novios en el resto de España y, si me apuran, en Europa. Permítanme, aunque sólo sea por esto último, que me muestre escéptico y me huela a “gato encerrao”.
Por otra parte, no me extraña que el Sr. Cruz, que ha sido capaz de montar un bochornoso espectáculo derivado de su condenable agresión, se sienta como pez en el agua montando un “tinglao” de dimensiones estratosféricas a cuenta de la ya famosa Paramount. Lo más grave es que nuestros gobernantes locales, a los que se les ningunea desde el Gobierno Regional, estén dispuestos a modificar nuestro Plan General de Ordenación Urbana, que aún está pendiente de su aprobación definitiva, sin que exista un proyecto tangible.
De nuevo, el cuento de la “gallina de los ladrillos de oro” cobra protagonismo en el PPSOE. En esta ocasión, me parece que el huevo es tan gordo que sólo puede ser de avestruz. Espero que nuestros políticos no escondan la cabeza bajo tierra y dejen al descubierto la retaguardia, porque las consecuencias pueden ser verdaderamente imprevisibles.
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