Artículo de Damián Rubio publicado en Infolínea
El pasado sábado día 13, como era
preceptivo después de las Elecciones Locales, se realizó el acto de
constitución de la nueva corporación municipal, así como la elección del
alcalde por parte de los concejales electos.
En el pleno de cierre de
legislatura, Diego Conesa, portavoz del PSOE, propuso con carácter de urgencia que
el acto se celebrase en la Casa de la Cultura en lugar del Salón de Plenos,
argumentando el escaso aforo de este último para un evento en el que se preveía
una asistencia de público importante. La citada propuesta se aprobó, aunque sin
mucho entusiasmo, por el resto de Grupos.
A las 12 en punto del citado día,
con el salón de la Casa de la Cultura a rebosar, tal y como marca el protocolo,
se constituyó la mesa de edad e
inmediatamente se procedió a la toma de posesión de cada uno de los concejales
electos, mediante promesa o juramento. La nota curiosa la protagonizó uno de
los concejales del PP que renunció a su acta de concejal con anterioridad a
este acto argumentando motivos personales, que probablemente no habrían
existido si su partido hubiese seguido gobernando.
Posteriormente, se procedió al
acto más esperado del día: la elección del alcalde. Todo el mundo esperaba que,
al no existir pactos previos, cada partido votase a su candidato, lo que
automáticamente otorgaba la alcaldía a Diego Conesa, como cabeza de lista del
partido más votado en las Elecciones. Esto se daba por hecho por el propio
candidato y por los medios de comunicación.
El recuento de los votos emitidos
por los concejales, provocó una gran sorpresa y un tremendo revuelo entre el
público asistente a partir del cuarto voto a favor de Juan Romero, candidato de
IU-Verdes, que acabó recibiendo 10 votos, ya que a los de su Grupo se sumaron
los 7 del Partido Popular. Diego Conesa recibió los 9 votos del PSOE y el candidato de Ciudadanos
consiguió los 2 votos de su Grupo. Así las cosas, y después de unos instantes
de incertidumbre y confusión al no conseguir ningún partido los 11 votos que
suponen la mayoría absoluta, Diego Conesa se proclamó Alcalde de Alhama por ser
el candidato de la lista más votada en los pasados Comicios Municipales.
Todavía no entiendo los motivos
que llevaron al PP a votar al candidato de IU-Verdes. Lo que sí tengo claro es
que no lo querían como alcalde, sino como instrumento para aguar la fiesta al
PSOE. Sobre lo que no tengo ninguna duda, como Coordinador Local de IU-Verdes
Alhama, es que no ha existido ningún pacto, acuerdo o conversación con el
Partido Popular que motivase su voto a Juan Romero. Por la cara de sorpresa del
ex-alcalde, tengo la sensación de que alguien le falló en la votación para
“redondear la faena”.
Supongo que la “faena” tenía dos
claros destinatarios: PSOE e IU-Verdes. De una misma tacada se le chafaba la
fiesta al candidato del PSOE y se metía en un serio compromiso al candidato de
IU-Verdes. Lo que no acabo de entender es qué ganaban con esto, ya que el
gobierno municipal lo tenían perdido “de todas, todas” porque los alhameños
eligieron el 24 de mayo un gobierno de izquierdas, como ya expresé en esta
misma columna al analizar los resultados.
Damián Rubio es Coordinador Local de IU-Verdes Alhama
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