miércoles, 18 de noviembre de 2009

UNA DE RECORTES

Recientemente la prensa regional se hacía eco de la asignación económica que la Comunidad Autónoma tiene previsto destinar a los distintos ayuntamientos de la Región, procedente de su presupuesto para el 2010. Concretamente, Alhama desde el año 2007 viene sufriendo una rebaja considerable en los fondos procedentes del gobierno regional. Para ser más precisos, en el primer año de gobierno PPSOE nuestro Ayuntamiento superó los 20 millones de euros y, a lo largo de la legislatura, año tras año, esta cantidad ha ido descendiendo hasta los 4 millones previstos para el próximo año 2010.
Siempre que tengo ocasión pongo de manifiesto que, dentro del organigrama de la Administración, los ayuntamientos, pese a ser la institución más cercana a los ciudadanos, son la hermana pobre que percibe las migajas de los gobiernos estatal y regional. Esta situación hace que las entidades locales para atender las demandas de sus vecinos, en demasiadas ocasiones, se vean en la necesidad de afrontar gastos que no les corresponden y para los que no tienen suficiente financiación.
Los ciudadanos contribuimos al mantenimiento de las instituciones públicas con nuestros impuestos, que van a parar a las arcas de las distintas administraciones. Resulta evidente que los ayuntamientos no pueden subsistir exclusivamente con los impuestos, tasas o precios públicos de carácter municipal, y se hace necesario un aporte de fondos procedentes de otras administraciones. Me parece evidente que si en 2007 recibimos 20 millones de euros y para 2010 vamos a recibir 4,3 millones, nuestro Ayuntamiento verá mermados hasta una quinta parte los recursos precedentes de la Comunidad Autónoma. Esto no me parece lógico ya que los presupuestos regionales vienen aumentando cada año, parece ser que lo que ha cambiado respecto a Alhama es el criterio de reparto.
Creo que la proliferación de Convenios Urbanísticos aprobados por nuestro Gobierno Local, así como las frecuentes manifestaciones de nuestro primer edil diciendo que “aquí no hay crisis”, tienen mucho que ver en este recorte presupuestario. Esta misma restricción se puede apreciar en las escasas inversiones previstas para el Plan de Obras y Servicios, así como en el rechazo de las solicitudes presentadas por nuestro Ayuntamiento para continuar con los talleres de empleo.
Resulta curioso como en la información periodística, a la que hago referencia al inicio de este artículo, se deja caer la sospecha de que los ayuntamientos con alcalde socialista han resultado claramente perjudicados en el reparto de los presupuestos regionales, quedando éstos por debajo de la media. También me ha resultado chocante que Alhama se incluya en el grupo de consistorios con gobierno socialista. Me parece muy triste que antes de que se produzca el cambio de alcalde ya se nos pase factura. Quedan en entredicho aquellas manifestaciones de nuestros dos alcaldes en las que alardeaban de los enormes benéficos que traería el pacto PP-PSOE, por su conexión directa con los gobiernos nacional y regional.
Queda patente que los alardes de riqueza de nuestro Alcalde, y de algunos de los miembros de su gabinete, nos están perjudicando seriamente. No les vendría mal una cura de humildad, poner los pies en la tierra y no esperar, continuamente, regalos de mecenas privados para sufragar los gastos municipales.

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