El pasado día 12 de enero, tuvo
lugar en Alhama un acto sectorial organizado por el Partido Popular relacionado
con el turismo en la Región de Murcia. En el mismo se habló, entre otros asuntos,
del famoso proyecto Paramount. En principio, estaba previsto que el citado
evento se desarrollara en los locales del Vivero de Empresas de nuestra
localidad, sin embargo “alguien” aconsejó que se hiciera en un lugar con mayor
aforo para darle al acto un marcado carácter propagandístico. Para asegurarse
el llenazo no tuvieron reparos en “tocar
la corneta”, reclutando así a un buen
número de dirigentes populares de toda la Región.
Observando las fotos que aparecen
en el periódico local, se me viene a la cabeza lo que han cambiado los tiempos
en lo que a propaganda política se refiere. Antiguamente los partidos
planificaban sus mítines para desarrollarlos durante los periodos electorales,
realizando su campaña en los días previos. Sin embargo, en la actualidad, los
dos partidos mayoritarios nos tienen acostumbrados a realizar una campaña de
permanente presencia en los medios de comunicación, dándose autobombo y
realizando actos sectoriales por doquier, para cubrir su cuota de aparición,
previamente establecida, como si de un periodo electoral inacabable se tratase.
Es una forma de garantizar el bipartidismo, que tanto interesa al poder
económico y mediático de este país.
Evidentemente, como no soy adepto
a la causa, ni me invitaron ni asistí al acto mencionado. No obstante, como ha
trascendido ampliamente en los medios locales y regionales, me ha llegado
información suficiente para opinar sobre el mismo.
En primer lugar, me resulta
desagradable, por lo reiterativo, el manido discurso del Sr. Valcárcel, que se
siente un iluminado al considerar que sólo él tiene la potestad y habilidad
suficientes para velar por los intereses de los murcianos. Cualquiera que ose
cuestionar su política es poco menos que un renegado, que sólo quiere el mal
para nuestra Región. Sin duda, las distintas fuerzas políticas tenemos diferentes
visiones de lo que es bueno para nuestra Región y sobre la forma de llevarlo a
cabo, pero de ahí a afirmar que se discrepa sólo porque se tiene mala intención
hay un abismo. Creo que es un discurso de baja catadura moral y política, que
sólo busca el aplauso fácil de sus incondicionales.
Por otra parte, durante el acto,
los ponentes, especialmente el consejero Cruz, dejaron caer una serie de afirmaciones que no
obedecen a la verdad, tales como que “el Plan General de Ordenación Municipal
de Alhama contó con la unanimidad de todos los grupos políticos”, cuando las
actas de pleno demuestran que tres de ellos no lo aprobaron; o que sobre las
recientes sentencias que afectan a los espacios protegidos y el urbanismo
regional, los servicios jurídicos municipales se habían pronunciado diciendo
que todo estaba bien en Alhama, cuando no existe, a día de hoy, ningún informe
jurídico al respecto.
No me cabe duda de que el acto
sectorial organizado por el PP en Alhama tenía como principales objetivos
insistir en las bondades del proyecto Paramount, para complacer al Sr. Samper,
y continuar apropiándose del mismo como una apuesta personal de Valcárcel para
seguir vendiéndonos el ladrillo como única forma de progreso en nuestra Región.
Por cierto, aunque parezca no
venir a cuento, visionando las imágenes del mitin sectorial tuve la percepción
de que, sobrevolando el acto, había más “pájaros” que gaviotas alhameñas.
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